7 de octubre de 2008

El Bloque "Diálogo por Buenos Aires" se opuso al proyecto macrista para el Teatro Colón



11 de septiembre- Durante la Sesión de la Legislatura Porteña.

El proyecto oficial propone una falsa autarquía: en realidad, el Ejecutivo Porteño tiene poder de decisión absoluto sobre el nombramiento y remoción de 4 de los 5 miembros del Directorio, mientras que los trabajadores del Teatro son representados tan sólo por el miembro restante, constituyendo una minoría meramente simbólica.

De mayor gravedad aún es que no se asegura la continuidad ni de los mundialmente reconocidos cuerpos estables ni de los talleres de producción del Colón. En cambio, se permite el alquiler de los salones y la prestación de servicios para terceros del sector privado, para cualquier fin, privatizando de hecho gran parte del Teatro.

Por otra parte, el proyecto es ambiguo en cuanto a las obligaciones de la legislación laboral, de administración financiera y de contrataciones que rige en el resto de la administración, pudiendo dar lugar a manejos arbitrarios y discrecionales de los fondos públicos. Tampoco se aplicarán los controles de legalidad de la Procuración General de la Ciudad.

En el marco de la calamitosa situación en la que se encuentra el Teatro Colón, este proyecto no sólo no resuelve ninguno de sus problemas, sino que desvía la atención de los necesidades urgentes que todos los días deben padecer los trabajadores del Teatro Colón.

Por estos motivos, el Bloque "Diálogo por Buenos Aires" decidió no acompañar esta iniciativa, y votó en contra en el recinto legislativo.

Al respecto, la diputada Gabriela Alegre declaró: "Lo que se acaba de votar es inoportuno y no soluciona ninguno de los problemas del Colón, cada vez más graves por la falta de gestión del Gobierno: más que nada, pone en evidencia la connivencia que existe entre el Frente para la Victoria porteño y el oficialismo en este tema, lo que queda demostrado en la composición del directorio que se propone. Además, continua con la lógica privatista del gobierno macrista, al permitir el alquiler del patrimonio cultural de la Ciudad para fines privados sin ningún tipo de restricción".

Y agregó: "Este proyecto no garantiza la continuidad de los cuerpos estables y técnicos del Teatro Colón, dando lugar a la reducción del personal y generando inestabilidad laboral entre los trabajadores".